El ahogamiento en los niños y menores es uno de los sucesos más trágicos que puedan darse y que causa un tremendo impacto en el núcleo familiar y su entorno.
La probabilidad de que un niño fallezca por ahogamiento se incrementa entre los 12 y los 48 meses, cuando adquieren las destrezas motoras suficientes como para andar y empezar a desenvolverse solos, ya que en ese momento la supervisión de los adultos se relaja en una gran medida. El ahogamiento es la principal causa de muerte accidental en niños entre 5 y 14 años en todo el mundo.
En Estados Unidos es la segunda causa de muerte accidental entre los niños de 1 a 4 años con una mortalidad de 3 casos por cada 100.000. En algunos países asiáticos o africanos los índices de muerte son de 10 a 20 veces más elevados (1).
Del estudio preliminar
de los datos se pueden resumir varios hallazgos cualitativamente
significativos:
‐ Los varones se ahogan en una proporción superior a las mujeres en
cualquier grupo de edad.
- Más del 70% de los ahogamientos son mortales o bien precisan de hospitalización
- Más del 70% de los ahogamientos son mortales o bien precisan de hospitalización
‐ La mayoría de los ahogamientos de menores se producen en las piscinas
domésticas no vigiladas y playas.
- Por cada fallecimiento por Ahogamiento, se estima que otro menor
presentará secuelas más o menos permanentes por el resto de su vida
- Los principales factores de riesgo son:
- La falta de supervisión adulta cercana
- La ausencia de sistemas de protección que impidan a los menores
acceder al agua: Vallado de piscinas, etc.
Descarga el informe completo en este enlace:
Recursos para la prevención del Ahogamiento Infantil
Descarga la aplicación "Vamos a la Pisci"
Sigue en Twitter: #Vamosalapisci
Apoya la Campaña #OJOpequealagua en Twitter